Los accidentes y las emergencias pueden ocurrir con o sin previo aviso, como una fuerte tormenta de nieve, un huracán, una inundación o un incendio inesperado. Cuando ocurren, todo el mundo, incluidos los usuarios de oxigenoterapia, debe ser capaz de actuar con rapidez. Para asegurarse de que está preparado para cualquier cosa, ya sea una evacuación o una situación en la que tenga que quedarse quieto, asegúrese de tener preparado su oxígeno.
Recuperar la electricidad
Es fácil que se vaya la luz, pero no siempre es fácil solucionar el problema. Póngase en contacto con su proveedor de energía para ver si puede acogerse a una lista prioritaria en caso de apagón. Si no cumple los requisitos o no existe tal lista, es posible que pueda obtener de ellos un generador temporal gratuito mientras dure el apagón.
Tenga pilas de repuesto a mano
Quienes utilicen concentradores de oxígeno portátiles deben asegurarse de que disponen de energía suficiente para hacer funcionar sus máquinas hasta que puedan recargar las baterías agotadas. Siempre debe tener a mano una batería completamente cargada que pueda girar con su batería normal, pero también debe tener baterías de repuesto.
Sin embargo, el almacenamiento a largo plazo de las baterías de litio debe hacerse con cuidado. Para asegurarse de que su batería no pierde capacidad, lo ideal es almacenar sus baterías con una carga del 40% a unos 60 ° F. También puede rotar todas sus baterías adicionales para asegurarse de que al menos una está completamente cargada y no se utiliza.
Conozca sus baterías
En caso de emergencia, necesitas saber exactamente cuánta energía te queda. Aprende cuánto tarda en cargarse una batería desde que está vacía hasta que está completamente cargada y cuánto suelen durar tus baterías en tu configuración específica. Con esta información, podrás planificar mejor si necesitas una fuente de alimentación alternativa y cuándo.
Mantenga la batería a la temperatura adecuada
Sus concentradores de oxígeno portátiles son susceptibles a las condiciones ambientales. Si viaja a un lugar donde hace especialmente calor o frío, tenga en cuenta que estas temperaturas pueden afectar al rendimiento de sus baterías.
Asegúrese de consultar el manual del usuario para conocer las temperaturas de almacenamiento ideales para las baterías de su concentrador de oxígeno portátil, con el fin de evitar dañarlas mientras viaja. Si almacena las pilas a la temperatura óptima, se asegurará de que estén listas para su uso cuando más las necesite.
Sepa dónde (y cómo) ir
Si tiene que salir de casa, asegúrese no sólo de tener un lugar seguro al que ir, sino también una forma segura de llegar. Si piensa ir en coche, llénelo de gasolina y lleve el teléfono móvil cargado, junto con cargadores de móvil adicionales y el concentrador de oxígeno para utilizarlo en el coche.
Su lugar seguro puede ser la casa de un familiar o amigo, pero un hotel también es una buena opción. Para los usuarios de oxígeno, los refugios públicos de emergencia pueden no ser la mejor opción, ya que es posible que no dispongan de instalaciones (por ejemplo, electricidad de emergencia) para hacer funcionar o cargar su equipo. No obstante, si sólo dispone de un refugio de emergencia, informe a los responsables de que necesita oxígeno. Asegúrese de que todos sus familiares, amigos y cuidadores sepan a dónde irá en caso de emergencia.
Hable con su médico
En caso de emergencia, cuando la electricidad es muy valiosa, es posible que pueda reducir el consumo de oxígeno para conservar la batería. Hable con su médico para ver si puede reducir el flujo o la dosis de oxígeno en caso de emergencia, pero recuerde que sólo debe hacerlo si el médico da su consentimiento explícito.
Tenga a mano un contacto de emergencia
Asegúrate de tener a mano un número de contacto de emergencia que sea visible para los demás en circunstancias de inseguridad. Asegúrese de que el número de contacto de emergencia está actualizado e incluye su nombre y el del contacto de emergencia. Es una buena idea poner una pegatina en el concentrador de oxígeno.
Planifique con antelación
No espere a que se produzca una emergencia para empezar a prepararse. Querrá tenerlo todo preparado para el improbable caso de que lo necesite. Sin embargo, si se produce una catástrofe, puede estar más tranquilo sabiendo que ha tomado medidas con antelación para asegurarse de que no tendrá que preocuparse de dónde conseguirá el oxígeno.
Prepárese para viajar
Planificar un viaje puede ser emocionante y llevar consigo su concentrador de oxígeno portátil no debe interferir en su diversión. Tómese su tiempo para preparar el viaje. Infórmese sobre sus planes de viaje y comuníqueselo a los demás.
Considere la posibilidad de llevar accesorios adicionales para su concentrador de oxígeno portátil, incluidas cánulas nasales y tubos, si los necesita. Llévese el manual del usuario por si tiene que solucionar algún problema durante el viaje. Estar preparado para viajar le dará tranquilidad, incluso si surgen circunstancias inesperadas.